Visitas al blog:

lunes, 23 de abril de 2018

¡Qué sustazo!

Hoy saqué el  barco a carenar. Aunque las referencias de la eslinga por la regala estaban bien, resulta que la de proa había pasado por detrás de la orza y luego con el peso del barco se había desplazado hacia delante a la altura de la regala, pareciendo que estaba bien. En realidad estaba pasada casi por la mitad de la eslora. Un movimiento brusco y el pobre Corto Maltés se habría ido al suelo por el morro. No nos dimos cuenta hasta estar fuera del agua, porque yo, desde dentro del barco, no veía la eslinga y el marinero no se dió cuenta. Lo llevamos a paso de hormiguita hasta la cuna, y por suerte mantuvo el equilibrio y no se cayó.


15 minutos de infarto hasta verle en la cuna, y temiendo que Murphy estaba intentando embarcarse también este verano con nosotros.

2 comentarios:

  1. Quiero artículos del corto en Skipper de sus viajes no de mas accidentes en seco jajajaja, me alegro de que este todo bien. Saludos.

    ResponderEliminar
  2. Tyler, en eso coincidimos al 100 %.

    ResponderEliminar

Los comentarios son bienvenidos. Lo más cómodo es poner tu nombre al final del texto y luego elegir como identidad "anónimo".